Páginas

Industrial

jueves, 28 de febrero de 2019

La vieja nave


LA VIEJA NAVE

El sol despuntaba, quedamos temprano mi amigo Juan de www.MiCamara.net. y yo. Aún con el frío de invierno, todo apuntaba que después iba a hacer calor, tras un tiempo de espera por el clima y asuntos personales había llegado la hora de volver a explorar.
El primer lugar se nos resistió, una pena pero no íbamos a meternos en un lío gordísimo por entrar, ni pegarle una patada a una puerta o derribar una valla. Oteamos desde la lejanía otras dos posibilidades que nuestra posición elevada nos dejaba ver en la distancia... dos disparos con el 300mm y zoom en la fotografía... parecían interesantes pero de difícil ruta. Habrían de esperar.
Finalmente cargamos coordenadas, íbamos a recorrer más kilometros pero... ¿merecería la pena?
Creo que eso, sinceramente, debéis juzgarlo vosotros mismos.
Una nave industrial. Al asomarnos por el hueco que daba acceso aparentemente diáfana con solo una silla con la que jugar... o no...
Las sorpresas te asaltan donde menos lo esperas, un interior lleno de polvo, olor a negocio cerrado, a despidos, a abandono, a decadencia y olvido. Aroma a tiempo pasado, cuando en su inmensidad los operarios ejercían su trabajo.
Poco queda ya de ese tiempo, pasa desapercibida, una cáscara de nuez vacía en un en un bosque de nogales. 
El recorrido fue lento, nos tomamos nuestro tiempo. posiblemente un taller. Zonas diáfanas extensas, el eco en su interior, en el exterior el murmullo incansable de la carretera cercana altamente transitada. Pena y lástima por la actividad perdida, pero diferente a un hogar, aquí los sentimientos dejados atrás son laborales, del dia a dia de compañeros, de celebración del día de Santa Nómina Bendita y de cabreos entre mandos y subordinados....

Sin más acompañadme a recorrer la vieja nave...


Recuerda que puedes dejar un comentario si gustas, ponerte en contacto conmigo a través del correo electrónico  o seguirme en instagram : @fotografiando_la_decadencia






Jugamos con la silla. antes de cruzar al otro lado de la nave, no tentamos a la suerte sentandonos en ella, las arañas habían creado su coto de caza privado por su esqueleto.


La soledad, el abandono, luces y sombras de la mañana a través de unos cristales que ya poco protegen.


Gastado, usado como juguete y olvidado.


Sorprende encontrarlos aun anclados en la pared. El azulejo brilla fuera la vida continua.


Inmensidad, altura, y el reloj que marca el inicio y fin de la jornada de trabajo.


El poder del tiempo,infinito tictac que desintegra nuestras huellas pasadas,hormigón que perdura, luz que dibuja, y en lo más profundo... decadencia y soledad.

Bob esponja estaría orgulloso de este Calamardo. 


Como una serpiente desenroscada, material contra incendios que dibuja su silueta en la pared.


Parte superior de un vehiculo. hubo un tiempo en que los descapotables y pick ups tenían esta opción de conversión. ¿Donde estara el resto?



Me encanta utilizar marcos naturales....


Llegamos al otro lado, un pequeño altillo y vigas férreas que lo sustentan, pero ni rastro de los cables que se escondían dentro de esos tubos.

Puerta automática, las carretillas cruzaron sus marcos en un tiempo de actividad frenética que ha quedado en el olvido

Como un juego del ahorcado, al tomar esta fotografía imagine que un séquito de muñecos pintados a aerosol venían a descolgar el cadáver, y montarlo en la carretilla de juguete...

Pilas de palets, textura y olor a madera que hipnotiza.


Desde el interior con el altillo te alejas de la inmensidad de la nave, separada en dos partes de igual tamaño y altura.


Un bidón, sacos de cemento, quizás en algún momento se pensó en hacer algo de mantenimiento a este viejo edificio.

La cabeza de la serpiente, mirando la escasa luz que se cuela por las ventanas.


El casquillo no aguanto el tiempo, casi descolgado por completo, sustentado por una columna que el frío y los elementos agrietaron.



No pude al salir evitar fotografiar la primera visión que tuve al asomarme, una silla solitaria, espacios diáfanos y arte callejero en las paredes. 

Espero como siempre que hayáis disfrutado, os espero como siempre en la siguiente entrada del blog. Un saludo.

4 comentarios: